SIERO

POLíTICA

José Suárez Palacio, Vicente García Riestra y Ramón Ríos Fanjul, víctimas del holocausto nazi, recibieron su merecido homenaje

Martes 07 de Mayo del 2024 a las 15:56


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Santa Marta de Carbayín y Pola de Siero acogieron los homenajes a los tres sierenses deportados a campos de concentración nazis tras la Guerra Civil Española. Se han colocado tres stolperstein, piedras del tropiezo, con sus nombres. En Pola de Siero dos, en recuerdo de José Suárez Palacio, nacido en El Cuto en 1917, y de Vicente García Riestra, nacido en Pola de Siero, en 1925. Riestra, fallecido en 2019, fue el último superviviente español del campo de concentración alemán de Buchenwald. En Santa Marta Carbayín, junto al monumento al minero, se ha colocado el adoquín en recuerdo a Ramón Ríos Fanjul (1875), natural de Fonciello, Meres, Tiñana.

El acto lo organizó la dirección general de Memoria Democrática del gobierno del Principado de Asturias, dependiente de la viceconsejería de Derechos Ciudadanos, en colaboración con las asociaciones Memoria Democráticas de Asturias, Grupo de Deportados de Asturias y el Ayuntamiento de Siero, que ha facilitado la colocación de los adoquines. El proyecto Stolspersteine comenzó en 1992 como una iniciativa personal del artista alemán Günter Demnig para rendir homenaje a las víctimas del Holocausto y ha ido creciendo hasta convertirse en un fenómeno internacional. Solo en Europa, se han colocado ya más de 100.000 adoquines.

En Santa Marta de Carbayín intervino Balbina Rebollar, del Grupo Deportados Asturias, comentó que se reunieron en la localidad para realizar un sentido y anhelado homenaje a las tres víctimas del holocausto nazi, “eran tres demócratas que combatieron el fascismo, primero en España y después en Europa, cobra especial relevancia en este momento el ejemplo de estos luchadores antifascistas, cuando vemos el peligro de las ideologías neofascistas que asolan la sociedad. Dar las gracias a todas las familias por acudir a estos homenajes, además al gobierno de Asturias, por su difusión de la memoria de los asturianos deportados. Los Stolspersteine aunque pequeños trozos de latón son algo muy grande, porque son lugares de memoria que hablan de cada uno de los deportados y nos ayudan a recordarlo, porque así seguirán vivos. Lo que hace el Grupo Deportados Asturias es devolverlos a la memoria con sus vidas e ideales, todo nuestro proyecto es para recordarlos, investigando, escribiendo sus biografías y difundiendo sus vidas. Colaboramos con la Dirección de Memoria Democrática en la petición y colocación de estos Stolspersteine. Hemos luchado y conseguidos el homenaje de reconocimiento de los deportados en el parlamento de Asturias, un acto muy importante para las familias. Nos queda el monumento a los deportados asturianos con todos sus nombres en Oviedo”, explicó.

Las familias y varios miembros del Grupo Deportados de Asturias fueron los encargados de leer las biografías de estas tres personas homenajeadas.

Ramón Ríos Fanjul. Nació en Fonciello, aldea asturiana de la parroquia de Tiñana (Siero), el 8 de abril de 1875. El 20 de agosto de 1940 fue encerrado junto a su familia en los vagones de carga del convoy 927. Cuatro días más tarde el convoy llegó a Mauthausen, uno de los símbolos del Holocausto nazi. Ramón Ríos fue trasladado el 24 de enero de 1941 al “komando de Gusen”, donde falleció el 12 de mayo de 1941 debido a las malas condiciones en las que se encontraba.

José Suárez Palacio. Nació el 20 de julio de 1917 en El Cuto, denominación tradicional de San Juan de Arenas o San Juan del Coto, aldea perteneciente a Carbayín, en el concejo de Siero. Llegó al subcampo de Gusen el 20 de octubre de 1941, donde sobrevivió menos de tres meses, ya que fue asesinado el 10 de enero de 1942 con apenas 24 años.

Vicente García Riestra. Conocido por la prensa como “nuestro abuelo del pijama a rayas”, nació en Pola de Siero en 1925. Fue deportado en 1943 y el último superviviente de origen español del campo de concentración nazi de Buchenwald, en Alemania.

La viceconsejera de Derechos Ciudadanos, Beatriz González Prieto, calificó de “leyes negacionistas” las proposiciones de leyes autonómicas de la concordia presentadas por el PP y Vox en varias comunidades donde gobiernan juntos –Castilla y León, Aragón y la Comunidad Valenciana–, en un intento por derogar las actuales normativas de Memoria Democrática. “Lo que ellos llaman leyes de la concordia no son más que la fórmula para legitimar el régimen franquista, eliminando términos como dictadura. Quizás las deberían llamar leyes negacionistas”, ha asegurado.

González Prieto entiende que las iniciativas presentadas por el PP y Vox “suponen un retroceso en memoria democrática”, ya que “niegan el franquismo y equiparan víctimas y verdugos”. “Este posicionamiento les sitúa como gobiernos antidemocráticos, al atentar contra los derechos humanos”, ha indicado. A su juicio, corresponde al Gobierno central tomar en consideración las recomendaciones de las Naciones Unidas y “paralizar esas leyes”.

La viceconsejera también ha aludido al proyecto Stolpersteine, iniciativa que, con el acto de hoy, ha permitido instalar ya 44 de las cerca de 190 piedras de la memoria que el Ejecutivo autonómico prevé colocar en Asturias hasta el año 2026. “Este proyecto reconoce a quienes lucharon por la democracia. Humaniza, al poner nombre y apellidos al horror y la vergüenza que supuso la dictadura”.

En el homenaje también intervino la primera teniente de alcalde de Siero, Susana Madera, aseguró que se debe recordar la historia para que no se repita, y en ese recuerdo rendir homenaje a los que formaron parte de la misma. “Ramón, José y Vicente tres sierenses que han pasado a la historia junto a dos centenares de asturianos que vivieron en primera persona el horror de vivir en un campo de concentración. Dos de ellos no superaron las condiciones de los mismos. Se cumplen 5 años del fallecimiento de Vicente, su historia y legado ha llegado a nuestros días contado por el mismo. Aprovecho el acto para reconocer y agradecer su empeño en que sus historias se conozcan y sus luchas no queden en el olvido”, destacó.