LLANERA

SOCIEDAD

La parroquia de Posada premia la Trayectoria Pastoral ejemplificada en Pocholo y Consuelo

Domingo 18 de Febrero del 2024 a las 19:19


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El domingo 18 de febrero se celebró en la parroquia de San Salvador de Rondiella, en Posada de Llanera, la entrega de los premios a la Trayectoria Pastoral Don Liborio Colino, que en esta segunda edición recayeron en: José Manuel García “Pocholo”, miembro del consejo Pastoral de San Cucufate, y Consuelo González, catequista y miembro del Coro Parroquial de San Salvador.

Pero antes de esta entrega se celebró la solemne misa, que fue presidida por el Arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, que recordó que nos encontramos en Cuaresma, que es la pascua de la Resurrección y comentó que el pasado miércoles de ceniza, se recordaron los tres gestos de esta época: oración, ayuno y la limosna, para hacer una reflexión sobre la vida cristiana.

Una vez finalizada la Eucaristía tuvo lugar la entrega de estos premios, el presentador fue el vicario de la zona centro y párroco de la Unidad Pastoral de Posada, José Julio Velasco, que aseguró que estos galardones a la trayectoria pastoral se crearon con motivo de los 50 años de la parroquia, “en esta ocasión el jurado por unanimidad se los concedió a José Manuel García y a Consuelo González, en ello destacamos sus recorrido pastoral de entrega, buen hacer, servicio a las comunidades parroquiales de Santa María de Brañes, San Cucufate y San Salvador de Rondiella, además de su ejemplo vital. Agradezco a Don Fray Jesús que haya aceptado la invitación para compartir con nosotros este momento y ser él el que entregue los pergaminos de reconocimiento y la Cruz de la Victoria”, apuntó.

La primer en dedicar unas palabras a los feligreses, amigos, familia y vecinos fue Consuelo que se mostró muy alegre al recibir este premio, en su segunda edición, y sobre todo junto a su amigo Pocholo, “nuestras parroquias son un reflejo vivo en la fe, la comunidad, el trabajo en equipo, la amistad y el servicio y estoy muy orgullosa de pertenecer y poder participar en cada una de ellas. Tener la oportunidad de recibir este reconocimiento ha sido posible gracias a muchas personas: gracias José Julio por poner siempre las cosas tan fáciles y confiar plenamente en mí; Alicia por ser un referente para todos los catequistas, atenta y pendiente para que todo salga bien; gracias a mis compañeros catequistas; al coro que tantas celebraciones hemos hecho, sobre todo a la comunidad parroquial y a mi familia por su apoyo incondicional. Aunque entre en la parroquia hace muchos años junto a mis niñas sigo con las mismas ganas de colaborar para que nuestras parroquias sean un lugar lleno de amor, alegría y de comunidad”, destacó.

Pocholo dio las gracias a todos los presentes por su asistencia, y comentó que tiene 87 años y nació en Guyame en Llanera y confesó que no conoció mucho a Don Liborio por sus actividades labores y al formar parte de otra parroquia, pero si conoció su obra sacerdotal, de la que destacó su dedicación a los feligreses y el empeño de sacar adelante su obra principal que fue la construcción de la nueva iglesia de Posada, en el año 1969 colocó la primera piedra en cooperación con otras personas.

“Después de 50 años han seguido colocándose piedras evitando el deterioro de los templos, con rehabilitaciones importantes como es el caso de San Cucao, Villanueva, Agüera, Brañes, Villardeveyo y Arlós. Agradezco y reconozco el trabajo sacerdotal que ha permitido mantener una unión en la actualidad y se refleja en la creación de estos premios”, comentó. Además, Pocholo se acordó de los galardonados en la primera edición: Alicia Alconada, Miguel Álvarez y Carlos Moisés Morales “Carlitos”, que se llevó una mención especial.

José Julio Velasco anunció al finalizar los discursos que el jurado ya ha elegido a las personas premiadas en la tercera edición de estos galardones, que se entregarán en septiembre y son: Carmen Sanz, directora de Cáritas de Posada y Ana María González, directora del coro parroquial de San Salvador de Rondiella.