- Más de 6.000 alumnos y 145 centros escolares participan en la actividad de los Huertos Escolares
- En junio de 2026 estarán finalizadas las 24 viviendas de protección de Lugo de Llanera
- Adrián Barbón agradece el comportamiento cívico de la ciudadanía, llama a la unidad y confía en que el suministro eléctrico se restablezca por completo en las próximas horas
- Apagón eléctrico en toda España y Portugal
- Medio Rural libera en Llanera y Corvera un cárabo y una lechuza rescatados en marzo
ASTURIAS
ASINCAR, ASEAVA Y CINN-CSIC validan el bebedero capaz de reducir la incidencia de enfermedades en el ganado
El Centro Tecnológico ASINCAR, la Asociación Nacional de Criadores de Raza Asturiana de los Valles (ASEAVA) y el Centro de Investigación en Nanomateriales y Nanotecnología (CINN-CSIC) colaboran en el Grupo Operativo MATBAC.
A través del proyecto MATBAC, liderado por ASINCAR, se pretende desarrollar un bebedero funcional capaz de limitar la proliferación de microorganismos en zonas de uso común del ganado, como es el caso de los bebederos, donde resulta complicado llevar a cabo los procesos de limpieza y desinfección con la eficacia y periodicidad necesaria. Con ello, se pretende implementar barreras para el contagio horizontal, reduciendo con ello la incidencia de enfermedades entre los animales.
El martes 18 de marzo arrancó la última fase del proyecto en la que se valida un bebedero funcional, desarrollado en el marco del proyecto, a través de un estudio con dos grupos de animales, tendiendo solo un grupo acceso al bebedero funcionalizado. El estudio se realiza en las instalaciones de ASEAVA, se monitoriza periódicamente y compara el estado de salud general y la incidencia y proliferación de enfermedades entre los animales de cada grupo de estudio.
Para alcanzar este objetivo, se están desarrollando estrategias para modificar los bebederos utilizados actualmente a través de la implementación en superficie de un material inorgánico, inocuo para la salud y con capacidad antimicrobiana. Así, durante los últimos meses el CINN-CSIC y ASINCAR han trabajado en el desarrollo de recubrimientos estables y funcionales utilizando este tipo de material funcional, evaluando diferentes tecnologías para su óptima aplicación.
El proyecto, que está cofinanciado por la UE (FEADER), el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Consejería de Medio Rural y Política Agraria del Principado de Asturias, tiene un presupuesto total de 139.010,92€ y una ayuda pública de 125.887,52€.
Armando Menéndez, gestor de proyectos de MATBAC, en ASINCAR, explicó que el objetivo del proyecto es reducir la incidencia de enfermedades entre el ganado a través del desarrollo de materiales con funcionalidades específicas antimicrobianas. “La idea es desarrollar unos materiales con una capacidad antimicrobiana y aplicar esta funcionalidad en los bebederos, es decir, en zonas comunes de los animales, donde habitualmente es más fácil o más probable que se produzca esta contaminación cuando un animal enferma. Ahora mismo estamos en la fase de ensayo con ya un bebedero funcionalizado y estamos estudiando dos grupos de animales para ver la efectividad de éste. El proceso finalizará en septiembre”, destacó.
Adolfo Fernández, investigador del Centro de Investigación en Nanomaterial y en Nanotecnología, explicó que se encargaron del desarrollo de estos nuevos materiales antimicrobianos de naturaleza inorgánica, para posteriormente implementarlos en forma de recubrimientos en los bebederos. “En una primera fase lo que hicimos fue, cuando sintetizábamos esos materiales que están basados en vidrios, determinar en colaboración con ASINCAR a escala de laboratorio que tienen esa actividad, y eso ya ha sido comprobado con éxito, y ahora hemos aplicado el recubrimiento en uno de los bebederos y lo que nos queda es evaluarlo ya, en condiciones reales”, apuntó.
Javier Prendes, responsable de Astur Prendes Servicios Veterinarios, que están al cargo de la gestión de los animales de ASEAVA. “Realizamos la parte del control sanitario y la evaluación de la clínica que presentan estos animales a lo largo de todos estos meses. Principalmente nosotros venimos todos los días, observamos los animales que técnicamente no presenten ninguna sintomatología de ningún tipo de enfermedad, y luego semanalmente y quincenalmente tomamos una serie de muestras para protocolarizar un poco y tener controladas las posibles variables que nos den alguna pista de algún desarrollo o incubación de algún tipo de enfermedad”, destacó.
Comentarios
Noticias relacionadas
- La Coordinadora Ecoloxista denuncia que Nieves Roqueñí mintió en la Junta General al decir que no ha habido autorización para el almacenamiento de baterías
- Los ganaderos vuelven a concentrarse por el futuro de sus explotaciones
- Cogersa destinó 2,15 millones el año pasado a la construcción de la planta de basura bruta
- Carolina López: “VOX quiere una solución para Cayés, que exista una garantía para que el gobierno cumpla con la palabra y haga la Variante”
- Los Robles y Peñamayor se fusionan y se transforman en un colegio mixto a instancias de Educación
- El 112 celebró su día reconociendo la labor de los trabajadores del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias