LLANERA

SOCIEDAD

José Antonio Bande: “Voy a echar de menos el día a día, que es estar con tu gente, porque les he cogido mucho aprecio y cariño”

Miercoles 31 de Julio del 2024 a las 10:11


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El párroco de la Unidad Pastoral de Lugo-Pruvia- La Fresneda ha sido nombrado por el Arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, rector del Seminario Metropolitano de Oviedo. Labor que comenzará a realizar en el mes de septiembre, cuando dé inicio el curso escolar.

Bande nació en Luarca, ingresó en el Seminario Metropolitano de Oviedo y fue ordenado sacerdote en 1992, se estrenó como vicario parroquial de San Pedro de Pola de Siero de 1992-1998. Fue enviado a Roma en 1998 para ampliar sus estudios, donde estuvo hasta 2002 cuando obtuvo la licenciatura en Sagradas Escrituras. Cuando regresó a la Diócesis, en 2002 fue nombrado profesor en el Seminario Metropolitano y párroco de San Martín de turón y Santa Bárbara de la Cuadriella, en el Caudal, en 2003 el arzobispo le pidió asumir la parroquia de San Melchor de Quirós en Vallobín. Donde estuvo hasta 2013 que fue enviado a Salamanca para ampliar los estudios de Teología Bíblica, por lo que obtuvo el doctorado. Desde 2013 hasta 2018 fue párroco adscrito a los Santos Apóstoles de Buenavista y en 2018 es párroco de la Unidad Pastoral de Posada y Lugo junto a José Julio Velasco; fue el pasado año cuando le nombraron responsable de la Unidad Pastoral de Lugo- Pruvia-La Fresneda. Desde hace tres años imparte docencia en la Universidad de Oviedo, en Magisterio, y en la Facultad Padre Ossó.

“Paso de ser párroco y convivir con la feligresía a cambiar de feligresía. Mi labor a partir de ahora va a ser acompañar las vocaciones al sacerdocio, simplificándolo mucho. Hay otra tarea aneja que es cuidar de todo lo que es la comunidad seminario, que comprende además de los seminaristas a una comunidad de religiosas, las Franciscanas del Buen Consejo, que son cuatro, la comunidad Focolar, que la forman cuatro laicas consagradas y también el personal de servicios y administración. A parte de mí hay un formador y vierrector, Juan Ignacio, y un director espiritual, que se llama Jaime”, explico.

Bande confesó que lo que más va a echar en falta es el día a día con la gente de las parroquias, “son tres parroquias las que llevo Lugo, Pruvia y Villapérez, voy a echar de menos el día a día, que es estar con tu gente, porque les he cogido mucho aprecio y cariño en estos casi seis años, aunque en Pruvia llevo 9 meses. Yo fui el primer sorprendido de que me nombrarán rector del Seminario, no me lo esperaba para nada y más porque llevó poco tiempo en Pruvia”, apuntó.

El sacerdote comentó que antes de su nombramiento estaban trabajando y elaborando las líneas básicas del consejo pastoral de esta nueva Unidad, “el consejo lo forman los colaboradores que me ayudan de todas las parroquias, que dan las directrices y las orientaciones para la tarea pastoral. Un párroco puede llevar sus tareas a cabo gracias a sus colaboradores, a ese grupo de personas más estrechamente vinculadas y que tienen esa confianza por mi parte para realizar: catequesis, Cáritas, liturgia o pastoral juvenil. Esto era lo que estábamos realizando, porque ya se van a promulgar ya que están constituidas, para trabajar como una comunidad de parroquias”, afirmó.

Bande asegura que está completamente tranquilo al marcharse, porque queda en su lugar el padre, Sotero Alperi, que conoce la realidad de la Unidad Pastoral, junto a él estará un diácono permanente, Xicu. “No es tanto lo que asumes, sino también lo que dejas, porque cuando tienes cariño a alguien quieres dejarlo en buenas manos y confió en todos ellos al 100%, quedan en las mejores manos”, apuntó.

El sacerdote comenzará con su nueva encomienda en el mes de septiembre, pero estará hasta la fiesta patronal de Lugo de Llanera y realizará la mudanza los últimos días de agosto.

El párroco recuerda que la feligresía llanerense le recibió con expectación, hace seis años, y de manera muy buena, “no me conocían, porque mi labor previa fue como docente en el Seminario y en parroquias de otra demarcación distinta. Aquí venía tras 30 años de la labor pastoral realizada por Ignacio Gallo”, recordó.