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SOCIEDAD
El sacerdote, Steven Betancourt, da las gracias a los feligreses por su acogida durante la misa de la Virgen de la Cabeza en Meres
Meres está de fiesta. El lunes 29 de mayo se celebró la misa solemne en la capilla de la Virgen de la Cabeza y la posterior procesión con la imagen por los alrededores. Pero este año, los feligreses de la Unidad Pastoral de San Martín de la Carrera se despidieron de Jon Steven Rivas Betancourt, que fue ordenado sacerdote hace pocos días y todavía no sabe su destino. “Me siento muy agradecido con el Señor, porque ha sido muy grande conmigo y estoy muy alegre, y muy agradecido a la Unidad pastoral de San Martín de La Carrera, que durante este curso me han acompañado, acogido, de los que he aprendido mucho y con el párroco Don Manuel Alonso, con el que he estado mano a mano aprendiendo a ser cura. He sido y soy muy feliz”, destacó.
Betancourt tiene programada su primera misa como sacerdote el 6 de junio a las 19.30 horas, en la parroquia de San José en Gijón, fecha en la que cumple 26 años de edad. “Todavía no se mi destino final, me tienen que convocar”, apuntó.
La madre de sacerdote, Gloria Liliana Betancourt, comentó que estaba muy emocionada y contenta por su hijo, “desde los tres años ya sabía que quería ser cura, le preguntábamos de que quería disfrazarse y él siempre nos decía que de cura. Siempre estuve segura de que iba a ser sacerdote, nunca desconfíe que no lo pudiera ser, mis amigas me decían que cuando le llegara la edad de pavo y encontrara una novia se le quitaría la idea, pero yo nunca desconfíe en que iba a ser sacerdote y de los buenos. Estaba con la plena seguridad, me siento muy llena de gracia y de bendiciones, estamos toda la familia muy emocionada”, destacó.
También le dedicó unas palabras el sacerdote con el que pasó este año, Manuel Alonso, que reconoció muy emocionado su labor, gran trabajo, su entrega y sobre todo su ilusión por la nueva etapa que inicia. “Lo más importante que has hecho ha sido acompañarme a mí y te estoy inmensamente agradecido”, comentó emocionado. Alonso comentó a los feligreses la intención de construir una sacristía en la parte trasera de la capilla, por lo cual pidió la colaboración de toda la Unidad Pastoral.
Tras la misa y los discursos se realizó la procesión, acompañada de la Banda de Gaitas El Piñote de Argüelles.
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