SIERO

CULTURA

El colegio público de Carbayín Bajo solo cuenta con siete alumnos

Sábado 25 de Diciembre del 2021 a las 00:00


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El director del colegio público de Carbayín Bajo, Jacobo Vázquez, lleva varios años en el cargo, ya que anteriormente estuvo durante 10 años en el colegio El Cotayo de Carbayín Alto, como maestro de música itinerante con Carbayín Bajo.

En el Cotayo cuando la directora, que estuvo 12 años, lo dejó le propusieron a Vázquez ser director pero lo rechazó y al final el jefe de estudios cogió el cargo, pero su condición era que Vázquez fuera secretario. “Toni, que era el directo y yo, llevábamos entre los dos el comedor del colegio El Cotayo, pero se jubiló y tuve que asumir la dirección, porque tenía experiencia ya que había sido director en el CRA de Ceceda. Me cansé de la dirección pero cuando le dije a la inspección que quería dejarlo me dijeron que en Carbayín Bajo siempre estaba de director un interino o interina y cambiaba todos los años y el único funcionario de carrera que bajaba era yo, además de conocer a los críos y las familias y llevo cuatro años como director en este centro”, explicó.

El directo comentó que no salen plazas para ese colegio, porque en estos años han pasado de tener más de 50 alumnos a solo 7 este curso y su destino definitivo es el colegio Celestino Montoto, en Pola de Siero. “Estoy a gusto y bien, hay matriculados solo 7 críos y tengo muy buenas compañeras. Lo cierto es que el centro está pasando por unos momentos complicados y no me atrevo a garantizar la durabilidad del centro, con solo siete críos y los colegios del Cotayo y el CRA de Viella , con la escuela de Valdesoto, cerca y no sería de extrañar que en un tiempo prudencial decidieron cerrar el colegio, aunque la ley dice que con cuatro alumnos el colegio tiene que estar abierto, pero el año que viene perdemos a una alumna que se va al instituto porque es de 6º, nos quedaríamos con seis y eso sin pensar que ninguno decida cambiar de centro”, explicó.

Vázquez comentó que está él como docente y dos profesoras a medias jornadas. “Las instalaciones del centro están bien, cuidadas y mantenidas adecuadamente, contamos con una pista cubierta y los baños están reformados, en un entorno que es bastante desconocido considero pero merece la pena conocerlo. La mayoría de las casas de la barriada de Pumarabule están vacías”, apuntó.

El director recordó que hace algún tiempo la Asociación Amigos de la Manzana les propuso la idea de plantar manzanos en el patio de manera gratuita y así lo hicieron, además de ofrecer una charla a los alumnos y darles la merienda. “El colegio no da más de sí, porque hay muy poca población y está rodeados de otros dos grandes colegios. Además tenemos el mismo horario con el Cotayo de 9.30 a 14.30 horas, el otro cole tiene comedor”, afirmó.