LLANERA

SOCIEDAD

Carlitos, Miguel y Alicia fueron reconocidos con el premio “D. Liborio Colino” a la trayectoria pastoral

Domingo 28 de Noviembre del 2021 a las 00:00


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El domingo 28 de noviembre se celebró en la iglesia de San Salvador de Rondiella, en Posada de Llanera, la Misa Solemne de Acción de Gracias, que fue presidida por el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, y contó con la presencia de otros párrocos vinculados de una u otra manera al templo. Además de los sacerdotes de la Unidad Pastoral Posada- Lugo, José Julio Velasco y José Antonio Bande. Además, el coro parroquial cantó durante toda la celebración con los componentes actuales y los antiguos.

Durante su homilía el arzobispo recordó todos los sacramentos que recibe un feligrés a lo lago de toda su vida, para explicar el recorrido del templo a lo largo de estos 50 años, “toda una vida está encerrada en la historia de esta casa. Toda la vida pasa por este templo”, afirmó. También recordó la importancia de pedir perdón, “no muchas personas lo hacen en nuestro día, pero tenemos que tener en cuenta que vivimos en una sociedad plural, donde no todas las personas son cristianas, y donde no tenemos porque estar de acuerdo con todas las leyes, pero nuestra fe nos da fortaleza y luz, como la que nos da este templo que es una casa habitada, caliente y siempre tiene las puertas abiertas para todos”, destacó.

Premios

Una vez finalizada la liturgia tocó el turno de la entrega de los diplomas de los primeros premios “D. Liborio Colino”, a la trayectoria pastoral. El encargado de dedicar unas palabras a los homenajeados y a todos los presentes fue el párroco, José Julio Velasco, que explicó que hace un año se encontraba en el HUCA, porque esa misma noche le había dado un infarto y quiso dar las gracias por poder este año estar en la iglesia celebrando este acto. “Don Liborio Colino fue un ejemplo para mí era un ser entrañable, sensible y el mejor testimonio del señor. Además, fue el impulsor junto a otras personas de la construcción de esta iglesia, que cumple 50 años y por eso hemos decidido conceder unos premios con su nombre”, explicó.

El primero en recoger el diploma conmemorativo fue Carlos Moisés Morales “Carlitos”, que fue durante años el monaguillo, “para todos es una gran sonrisa y para mi el regalo que Dios me ha hecho, he aprendido muchas cosas de él y aún sigo aprendiendo con sus gracias socarronas”, explicó. El arzobispo y José Julio le hicieron entrega de su diploma.

El segundo de los diplomas fue para Miguel Álvarez, “hace 61 años ya rezaba el Rosario en la antigua iglesia y hoy en día es el sacristán, una persona sencilla, disponible, que se encarga de ayudar y resolver las dudas de todas las personas que acuden al templo. Es todo un ejemplo”, resaltó Velasco. La tercera persona homenajeada fue Alicia Alconada, que se encarga entre otras muchas cosas de coordinar el campamento de verano. El acto acabó con la entrega de un regalo por parte del alcalde, Gerardo Sanz, en nombre del Ayuntamiento de Llanera al arzpbispo.