LLANERA

SOCIEDAD

La Escuela Infantil Grandiella cumple 20 años

Viernes 02 de Diciembre del 2022 a las 00:00


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Pilar del Valle es la directora de la Escuela Infantil Grandiella, que abrió sus puertas el 2 de diciembre 2002, en Castañera, número 68. “Abrimos con un proyecto nuevo en la zona, donde no existía este tipo de establecimientos y servicios al público, con muchísima ilusión, que seguimos manteniendo y el mismo espíritu de lucha, aunque los vientos no son del todo favorables por temas como la economía, el trabajo y muchos más factores. Pero las ganas y la lucha continúa, porque la sociedad nos respalda y eso te anima a seguir, esperamos seguir unos cuantos años más en activo”, apuntó.

Del Valle aseguró que lo que ofrece esta Escuela diferente al resto es el entorno, ya que es privilegiado en cuanto a espacio, tranquilidad, naturaleza, confort para los menores, alejados de la contaminación de las grandes urbes. “Este emplazamiento nos permite pasar mucho tiempo en el exterior, en contacto con la naturaleza y lo que no tenemos lo buscamos y se lo traemos. Siempre pretendimos dar un plus de confianza a los padres, porque los padres primerizos no saben cómo abordar la compatibilización de muchas cosas y lo que buscan es nuestro apoyo y que se les entienda. Lo que hacemos es que vean que hay mucha gente como ellos, para que entiendan que puede compatibilizarlo con nosotros y que aquí está en buenas manos”, resaltó.

La directora explicó que los proyectos de la Escuela van muy relacionados con la naturaleza, “para nosotros es fundamental aprovechar todo el entorno desde lo básico. Apostamos por el reciclaje y para ello pedimos a Cogersa dos contenedores, de papel y plástico,  desde las aulas se hace la separación y cada cierto tiempo se llevan los residuos al contenedor. Contamos con un huerto pequeño, donde los menores ven cómo nace una patata o una lechuga, pueden tocarlo y ver cómo crece, así comprueban que no todo sale del super. Tenemos la cría de gallina, con la incubadora de techo transparente, para que vean como nacen los pollos y después como les cuida la gallina, comportándose como una madre, que identifican con la suya”, explicó.

Los alumnos están divididos por edades, en cuanto a las plazas los alumnos de 0 a 1 años son 8 plazas;  los de 1 a 2 serían 13 y de 2 a 3 son 18 las plazas disponibles, esto en cada turno, es decir, el turno de la mañana, que suele ser el que más se llena, y el de tarde. “Trabajamos de lunes a viernes y los horarios son flexibles, nos adaptamos a los horarios que las familias nos demanden”, resaltó.

Del Valle reclama algo más de apoyo a las instituciones, ya que este es un servicio básico, que permite a las familias conciliar, “las empresas son la base dela económica y no demandamos que nos ayude Papa Estado, sino que pedimos que nos potencien más y se nos de visibilidad. Si nosotros ahora mismo cerramos se pierden tres puestos de trabajo, que llevamos 20 años ejerciendo aquí nuestra profesión”, comentó.

La directora asegura que la pandemia fue un momento duro, ya que los más de dos meses de confinamiento estuvo cerrada la Escuela, “abrimos en cuento pudimos, buscándonos nosotros mismos el protocolo y adaptándolo, siempre estuvimos controlados por sanidad, pero nadie nos daba una directriz clara para poder trabajar. Ese verano fue muy bueno en cuanto a niños, aunque la ratio era más baja, pero dentro de lo que podíamos prestábamos un servicio a la sociedad, ya que los padres tenían que seguir trabajando, los trabajadores esenciales de manera presencial y el resto aunque tele trabajaran era muy difícil hacerlo en casa con niños de estas edades”, recordó.